La Jornada
26 de mayo de 2010
No operarán en nuestro territorio agentes estadunidenses, dice la canciller Espinosa
Georgina Saldierna
Los gobiernos de México y Estados Unidos acordaron enfocarse en la creación de terminales multimodales en ambos países, con el propósito de realizar en ellas las revisiones aduanales y de seguridad y, de esa manera, agilizar el cruce en la frontera.
Al informar lo anterior, el embajador estadunidense en nuestro país, Carlos Pascual, dijo ayer que un comité ejecutivo binacional analizará la posibilidad de que en los puertos en territorio mexicano opere personal de aduanas y de inmigración de su país. Sin embargo, la secretaria de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa, rechazó desde ayer tal situación.
“No habrá en México agentes del gobierno estadunidense desarrollando actividades que corresponden exclusivamente a las autoridades mexicanas, enfatizó la canciller en una conferencia de prensa convocada el lunes después de las 10 de la noche, luego de que por la tarde la embajada anunciara su decisión de informar sobre los acuerdos alcanzados en la visita del presidente Felipe Calderón a Washington.
En una sesión informativa por la mañana, Pascual reiteró el compromiso de su gobierno para agilizar la entrega de equipo técnico a dependencias mexicanas en el contexto de la Iniciativa Mérida. Refirió así que en octubre próximo llegarán a nuestro país tres helicópteros Black hawk para la Policía Federal y dos Bell para la Secretaría de la Defensa Nacional.
También señaló que se logró adelantar de 2013 a septiembre de 2011, la entrega de tres helicópteros para la Secretaría de Marina, y lo mismo sucedió con cuatro aviones caza destinados a la misma dependencia.
Al mediodía, la canciller Patricia Espinosa reiteró que los dos gobiernos llegaron al acuerdo de mantener la cooperación contra el crimen organizado por las características mismas de este tipo de delincuencia. No se puede pensar en que con dos o tres años de colaboración, el problema va a terminar y, por ello, se promueven acciones específicas tanto en el ámbito de la Iniciativa Mérida como en el tema del lavado de dinero y la localización de activos que pueden ser sospechosos.
Añadió que no ha se ha determinado la manera como se va a integrar la segunda parte de la iniciativa y tampoco se ha definido si se va a seguir llamando así o va a tener una nueva denominación, pero lo importante es que esta cooperación se mantiene, se fortalece y se sigue puliendo.
Sobre la oficina binacional que aterrizará los programas del citado programa, John Feeley, consejero ministro de la embajada estadunidense en México, dio a conocer que ha empezado a operar, pero no al ciento por ciento. Ello ocurrirá en los próximos meses.
Agregó que en su sede –cuya ubicación se negó a informar por seguridad– trabajarán 40 funcionarios de Estados Unidos y 25 mexicanos. Estos últimos apenas están siendo designados por la administración del presidente Calderón, explicó.
Sobre los puertos internos –o terminales multimodales–, el embajador Carlos Pascual añadió que el verano próximo se reunirá un comité ejecutivo binacional que trabajará en la creación de un proyecto para mejorar el comercio y los viajes transfronterizos. En dicha documento, planteará cuántos y cuáles puertos internos se crearán. Por ejemplo, Guanajuato es un lugar con conexiones de carretera y ferrocarril hacia la frontera y el mar, cuyas capacidades se están utilizando en 10 por ciento.
En ese sitio se pueden completar las funciones aduaneras y de seguridad que se tengan que hacer. Ahí se podrían sellar electrónicamente los camiones que transportan mercancías, ver la ruta que siguen a partir de mecanismos como el GPS, y crear en la frontera la capacidad de reconocer esa señal electrónica, para permitirles el paso si todo está de acuerdo a la señal, explicó el diplomático estadunidense.
El grupo analizará si agentes aduanales de Estados Unidos podrían trabajar en los puertos internos mexicanos y si funcionarios mexicanos harían lo mismo en el vecino país.
Espinosa rechazó esta posibilidad, al destacar que no podemos ni debemos pretender violentar los marcos jurídicos que privan en cada uno de nuestros países.
Por último, Carlos Pascual calificó la creación de estas terminales como un paso enorme e informó que los presidentes de ambos países también acordaron hacer compatibles las normas de producción en diversos sectores industriales, lo que redundaría en una disminución en los costos de producción.
El embajador Pascual y la secretaria de Relaciones Exteriores, Patrica Espinosa Cantellano, dieron un balance de la visita del presidente Felipe Calderón a Washington, luego de las críticas en torno a que nada concreto se firmó o se logró en el periplo del mandatario mexicano en su gira de trabajo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario